
- ¿Crees que es él? - preguntó uno al otro.
- ¿Por qué no vas y le preguntas?
El primer hombre se acercó al forastero y le dijo:
- Disculpe, ¿es usted el Hombre Educado?
- Si no me dejas en paz te romperé la cara - dijo el forastero.
El investigador regresó donde se encontraba su compañero.
- Y bien ¿es el hombre que estamos buscando?
- No lo sé, no quiso decírmelo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario